La conectividad generará en 2030 en la industria del automóvil un incremento de los ingresos del 30%, lo que equivaldrá a 1,5 trillones de dólares, según el presidente de Volvo España, Germán López Madrid.
En un encuentro informativo ha destacado que esos nuevos modelos de negocio vendrán por el impulso de la movilidad compartida, por los servicios de conectividad y por las actualizaciones de las distintas funciones que ofrezca el vehículo (acceso a internet, información y entretenimiento).
De acuerdo con su análisis de los cambios tecnológicos y su influencia en el sector, los vehículos en la actualidad deben responder a un estilo de vida hiperconectado del usuario.
Esto ha provocado que, además de tener un buen diseño, ser seguros y eficientes, se desarrollen en función de las nuevas tecnologías y de la conectividad, lo que supone una “gran diferencia” respecto a hace unos años.
Que los coches estén conectados y se comuniquen unos con otros, y con la infraestructura, es una de las líneas de trabajo y desarrollo de diferentes fabricantes de automóviles, universidades y administraciones, que buscan implementarlo de serie en los coches “de un futuro no muy lejano”.